DÍA DE LAS FUERZAS ARMADAS

Hoy se celebra el día de las Fuerzas Armadas, ese día especial en el que debemos acordarnos de todos aquellos hombres y mujeres que viven su vida con entrega y al servicio de nuestra nación y de todos los españoles.

El Ejército desarrolla una gran labor no solo a nivel de defensa militar, sino también a nivel de nuestra vida cotidiana como garantes de aquellos valores que caracterizan a nuestra sociedad: solidaridad, democracia, humanidad… La pandemia que atravesamos o la reciente crisis en nuestras fronteras con Marruecos han sido, entre otros ámbitos, claros ejemplos en los que el papel del ejército ha mostrado su cara más solidaria así como demostración de amor y entrega al prójimo.

El Ejército es un reflejo de nuestra propia sociedad donde existe libertad e independencia de ideologías políticas y/o religiosas, convirtiéndose en un poder del Estado totalmente independiente y al servicio publico. Sin embargo, al igual que nuestra sociedad está marcada por una sólida tradición religiosa cristiana católica, en nuestro Ejército hay un fuerte sentimiento en el mismo sentido.

Muchas han sido las participaciones de nuestro Ejército en contiendas militares tanto bélicas como en misiones humanitarias. En todas ellas, nuestros militares han sufrido los efectos de la guerra o momentos en los que su vida ha corrido un grave riesgo, motivo por el cual su fe ha sido ese clavo ardiente al que aferrarse en esos momentos de dificultades. Esa fe se plasma normalmente en una devoción particular de cada uno en una imagen de Cristo o de la Virgen María a la que, como nosotros, se sienten unidos, significados e sensibilizados de forma muy especial.

Por otro lado, la fe y devoción de por esas imágenes es uno de los orígenes del acompañamiento y participación del Ejército en los cultos públicos que celebran las Hermandades y Cofradías, tanto en Semana Santa como en otras muy diversas ocasiones. Ello ha provocado que a lo largo de la historia, se hayan ido forjando esos profundos vínculos entre corporaciones religiosas y los cuerpos o armas del ejército español, todo ello fruto de esa fe y la devoción hacia los titulares de las Hermandades y Cofradías.

Hoy, en este día de fiesta para nuestras Fuerzas Armadas, desde la Hermandad de Zamarrilla queremos felicitar a nuestros Ejércitos, pero muy especialmente queremos recordar a nuestros hermanos, los jinetes del Arma de Caballería, con quienes nos unen vínculos centenarios de hermandad basados en la devoción por nuestros sagrados titulares.

Elevamos, entre nuestras oraciones, una petición para que Nuestro Padre Jesús del Santo Suplicio, el Santísimo Cristo de los Milagros y María Santísima de la Amargura Coronada protejan y cuiden siempre y en todo momento de todos los componentes de nuestro ejército, muy especialmente de los miembros del Arma de Caballería, allí donde estén desarrollando su encomiable labor al servicio de nuestro país.

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