MARÍA SANTÍSIMA DE LA AMARGURA CORONADA REGRESA A LA ERMITA DESPUÉS DE LA PRIMERA FASE DE SU RESTAURACIÓN

Tras haber finalizado la primera fase del proceso de restauración en la sede del Instituto Andaluz del Patrimonio Histórico, nos llena de alegría y de gozo poder anunciar a todos nuestros hermanos y fieles devotos que la imagen de nuestra queridísima madre María Santísima de la Amargura Coronada ya se encuentra presidiendo el altar mayor de nuestra ermita.

La Santísima Virgen luce vestida como corresponde para el tiempo litúrgico en el que nos encontramos, habiendo sido ataviada de tal modo que resalta su hermosura y belleza.

Todos hemos extrañado y hemos echado de menos su presencia en la ermita pero, a la vez, hemos sido sabedores en todo momento de que ha estado presente entre nosotros y nos ha acompañado a pesar de su ausencia física. Por ello queremos animar a todos los Hermanos de Zamarrilla, a los vecinos de nuestro barrio y a los malagueños en general a disfrutar de su vuelta, mientras esperamos la siguiente fase de su proceso de restauración.

Una vez que ha retornado a la ermita la imagen de la Santísima Virgen y gracias a la mejoría de la situación de pandemia que se está produciendo, desde hoy día 6 de octubre, se recupera el rezo del Santo Rosario a las 19:30 horas en nuestra ermita, por lo queremos animar a la participación de todos en dicho rezo.

Del mismo modo, a partir del próximo día 10 de octubre se recupera la celebración dominical de la Santa Misa a las 11:00 horas en nuestra ermita.

A pesar de la mejoría de la situación de pandemia y de que en estos momentos se recupera el aforo del 100%, rogamos a los hermanos que continúen manteniendo el cumplimiento de las medidas de seguridad mediante el uso obligatorio de la mascarilla en el interior del templo, el uso del gel hidroalcohólico y la distancia de seguridad a los efectos de evitar posibles contagios y continuar avanzando entre todos para recuperar la tan ansiada normalidad.

Queremos aprovechar para pedir a nuestros Sagrados Titulares por el final de este tremendo mal que amenaza a nuestra sociedad y por los más pobres, los enfermos y los más necesitados.

Fotografía: Virginia Caro.